Crisis, JA

Ayer escribía sobre la perpetuidad que existe entre nuestra clase política y el contrasentido que tiene que algunos opinen sobre lo que otros pretenden hacer sin fijarse en ellos mismos, o en alguno muy cercano. Hoy toca ir un poco más allá y adentrarnos en la única empresa que no debe tener crisis en estos momentos, por no tener seguro que no tienen miedo a ningún ERE, ni ningún miedo ha quedarse parado y no poder afrontar la hipoteca, ni nada por el estilo.

Incluso mientras trabajan pueden dedicarse a navegar por Internet leyendo los periódicos o actualizando su blog, que no tienen un jefe que haya decidido que el informático de turno filtre contenidos y por tanto pueda leer el marca o el sport tranquilamente en su sillita.

Esta empresa existe, las nóminas son cercanas a los 4000 euritos la más baja, la asistencia al puesto de trabajo no es obligatoria, la semana laboral es de 3 días y el periodo vacacional puede ser de 4 meses y alguna semanilla más si en el año hay elecciones sea de cualquier tipo. La única obligatoriedad que tienen los pringadillos, la inmensa mayoría, es darle a un botoncito cuando toca, esto ultimo desde hace relativamente poco ya que no hace tanto alguno votaba hasta con los pies.

Este año, por una cosa que llaman cortesía parlamentaria, a los dos meses habituales de las vacaciones de verano, más a los casi dos de las vacaciones de navidad que disfrutan nuestras señorías tendrán unas semanitas más, hasta mediados de marzo desde esta misma tarde, porque hay elecciones en Galicia y Euskadi.

Los que participen en los mítines, o vayan de bulto, de las elecciones mala suerte, los demás, la inmensa mayoría, que se vayan de semana/s blancas que seguramente deben estar muy estresados. Eso si el miedo de que cuando vuelvan se encuentren las puertas de la “empresa” cerrada seguro no lo tienen. mientras los españolitos de a pie toreando como pueden la galopante crisis, algunos temen irse un viernes y que el lunes no puedan entrar a currar, pero claro eso no debe ser muy importantes para ellos.

Crisis, qué crisis