viernes, 9 de enero de 2009

Y como es, él? En qué lugar se enamoró de t......

"...has conseguido encabronarme y si “pepiño” se encabrona,
la cosa cambia"



Ayer, Julián nos contaba lo que creía era un sueño, y no lo fue. Yo, he escuchado esa conversación. Y lo que cuenta Julián, es cierto. Eso sí, a mi, no me sorprende el contenido de la conversación. Es más, incluso hablando con Julián sobre la misma, le dije: que lo curioso e incluso más grave, siendo muy grave que alguien con mando en plaza, te advierta que si tal o cual, que si haces esto o no lo otro, etc., etc, que como digo, que siendo muy grave, lo grave, lo digo muy en serio, es la forma gramatical utilizada, cuando la persona, se refiere a si misma y que los políticos, muchos, la utilizan.

Me refiero a hablar de si mismo, referirse a uno mismo, en tercera persona. Algo asi, como, cuando manolito se enfada, y manolito, está muy enfadado, refiriendose, a él mismo. Cuando lo normal, es decir, me he enfadado, etc. Lo de la amaneza, otro día, lo hablamos.

Como que considero grave este detalle, también. Muy sencillo: Cuando las personas hablan de esta forma, si son crios de seis o así ,de edad, esto no es ninguna broma, es decir, que no distiguen el yo, tu, el, etc, es muy recomendable llevarlo a un neurólogo, que si descarta enfermedades neurológicas, nos remitirá a un sicólogo, ya que un crio que habla de esta forma, es muy preocupante y algo, a veces grave, ocurre.

En cambio, ya talluditos, entrados en edad, hablar de esta forma, solo demuestra algunas cosas. Y no solo en este caso, hablo en general de todos los que hablan, así. Lo neurólogico se debería descartar, también, aunque en estos casos, obedece a algo menos grave, que en edades infantiles. Entre ellas y otras, que, intentan oultar el yo, los más avezados en estos temas, saben a qué, me refiero. Si en vez de seis, tiene cuarenta de edad, un grave problema de identificación, consigo mismo, aunque en diferente plano, que con una edad infantil.

Si se profundiza más en este aspecto, hablar en tercera persona, indica ocultar las verdaderas intenciones. Todo esto aplicable a gente, llamaremos, "normal". Cuando el tema se da en políticos, jefecillos de empresas, gente que manda, etc, ya me entinden, ademas, de lo anterior, demuestra una vanidad excesiva, falta de legitimidad, de autoestima, y de seguridad en si mismos, que roza la patología. Y un intento, de engrandecer su figura, en estos casos institucional, y de esta forma tan rimbombante de referencia personal, hacer entender al interlocutor, o interlocutores, que ojo, que yo - él -, no soy un mierdecilla, como, yo - él - , creo y estoy seguro, que el resto me ve - le ve, así.

Referirse a uno mismo con un "yo", normal en todos los sentido, solo demuestra, una madurez sana, el resto, implicaciones más complejas de personalidades inmaduras, llenas, de complejos, inseguridades, ideaciones muy preocupadas, del como creen, que les ve la gente. Es decir, que saben, eso creen, como son vistos, por el resto, e incluso, en la mayoría de las ocasiones, están equivocados. Es en este punto, cuando la patología, puede ser una realidad. Hablar de él, referido a si mismo, incluso la despersonalización, es evidente. Una manera de desde el yo, uno mismo, ver, en este caso verse, desde fuera, y así admirar, lo que deben admirar el resto, y no lo hacen, o eso creen en estos casos.

Resumiendo, un ego inmaduro, y autoinflado, en toda regla de quienes osan, hablar de si mismos, de esta, RIDÍCULA, forma. Asi que político que hable así, de si mismo que se lo haga mirar o mejor aún, no lo voten. AH, es verdad, esta el tema de las listas cerradas. En fin, que para conducir una vespino, o cualquier cosa, te hacen una prueba sicológica, y en la política, nada de nada. Creo recordar, no estoy muy seguro, que el eminente psiquiatra: Rojas Marcos, hermano de político muy conocido, escribió un libro, sobre la sicología en la política, en esta caso, de los políticos. Y no es ninguna tonteria. Se imaginan a un sicópata dirigiendo un país, etc. Casos, hay, seguro.

Los motivos de tan curiosa manera de hablar de uno mismo, son varios. Solo uno, será el que sacaremos a colación, aquí. Ni más ni menos, que toda persona, toda, de las muchas cosas que necesita en la vida, en su sicología, etc., es ni más ni menos, como digo entre otras varias, el reconocimiento.

Si el mismo, no es correspondido, cuando el sujeto, en todo momento cree, si es cierto o no es otro tema, que se le debe habida cuenta de sus esfuerzos, y creyendo sin autocrítica ninguna o subjetividad manifiesta, que lo merece, y no se le reconce o eso creen, a parte de otras considerasciones que igual otro día contamos, utiliza cuando se refieren a si mismos, la tercera persona en vez de la primera, en su gramátca diaría, de tal forma, que quede claro, que es quien es y no como él cree, que el resto lo ven, es decir, no un mierdecilla cualquiera.

Aunque simplificando al máximo, mi cuñado y la mayoría de mortales, simplemente al ver a algunos políticos hablando de si mismos, de esta forma, pensaremos que tratamos, con imbéciles. En fin, sobre el otro aspecto de la conversación, no la parte gramatical, y que muchos políticos utilizan, solo diré, que me recuerda mucho su actitud en el "diálogo", a no se, más o menos, a lo que vemos en la imagen:



Napoleón Bonaparte (apodado en su tiempo por: “El petit Cabró”).

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